Este es el camión eléctrico más grande del planeta. Puede llevar 290 toneladas con una carga máxima de 510 toneladas usando una pila de hidrógeno. Tiene una potencia de 2.682 caballos, se llama nuGen Zero Tranmission Haulage Solution. Según la compañía minera, que ha fabricado otros volquetes similares pero de menor escala, no existía nada parecido en el mundo y tuvieron que construirlo casi desde cero. El único elemento que ya estaba hecho fue el volquete, que empezó su vida como un vehículo diésel. La empresa eliminó el motor de combustión e instaló una pila de hidrógeno diseñada y construida por ellos mismos. Aseguran, es la más grande del mundo, con una capacidad de dos megavatios. También dicen que el proceso de reconversión aligeró el camión diésel original, llevándolo a 220 toneladas y aumentando así la capacidad de carga. El volquete también usa un sistema de recuperación de energía inercial (el llamado frenado regenerativo o KERS) para disminuir el consumo eléctrico. También puedes leer: Cadillac Fleetwood Eldorado Convertible, el coche más largo del mundo Anglo American afirma que este tipo de vehículos son los mayores contaminantes en sus explotaciones, consumiendo un 80% de todo el combustible diésel utilizado. Aún más grave: dicen que este tipo de megacamiones producen el tres por ciento de todas las emisiones anuales de dióxido de carbono a nivel mundial, un número sorprendente cuando se considera que toda la aviación comercial genera un 2,1% de todas las emisiones de CO2 producidas por el ser humano. Para reducir todas las emisiones a cero, la otra pieza clave del sistema es la producción de hidrógeno que, según la compañía, se produce en la propia mina utilizando un sistema de electrólisis de 3,5 megavatios alimentado por paneles solares de 100 megavatios para producir diariamente una tonelada de hidrógeno 100% verde. Medio ambiente y ahorro económico De hecho, la compañía afirma que el año que viene el 56% de todo consumo energético vendrá por las renovables. Eso aparte de estos camiones, de los que dice estar construyendo cuarenta sólo para la mina de platino sudafricana, además de otros tantos vehículos para reconvertir el transporte cada una de sus minas de cobre y hierro en Chile y Sudáfrica. Aseguran que quieren que esta transición se realice totalmente antes de que termine la década. El objetivo de Anglo American no es salvar el mundo sino ahorrar costes. Cortar total o casi completamente su dependencia de los combustibles fósiles resultará en millones de dólares ahorrados al año. El otro efecto secundario de esta transición, dicen, es que contribuirán a acelerar la industria del hidrógeno, que según el Consejo del Hidrógeno “podría representar el 18% del consumo energético mundial en 2050”
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