proZesa

Vamos a hablar de un tema apasionante: Colonizar la Luna.

Pero cuidado, ya que si fueras transportado a la Luna ahora, morirías de manera muy rápida.

Esto se debe a que no hay atmósfera, y que la temperatura de la superficie varía desde un infierno de 130 grados hasta un frío horrible de -170 grados centígrados.

Pero si la falta de aire, el calor o el tremendo frío no te matan, entonces, seguramente lo harán, el bombardeo de micrometeoritos o la radiación solar.

Y es que, según todos los informes, la Luna no es un lugar hospitalario para vivir.

También puedes leer: Así está la Carrera Espacial entre EEUU y Rusia a día de hoy

Por esta razón, si los seres humanos vamos a volver a explorar la Luna y, potencialmente, vivir allí algún día, tendremos que aprender a lidiar con estas desafiantes condiciones ambientales.

Por lo tanto, necesitaremos hábitats, aire, alimentos y energía, así como también combustible para impulsar los cohetes a la Tierra.

Os dejo el vídeo sobre Colonizar la Luna la continuación:

https://youtu.be/vFjDL0sJ_cE

Y es que la Luna es una gran candidata para una futura colonia.

De hecho, ya hemos estado allí unas cuantas veces, pese a que se empeñen a negarlo ciertos conspiranoicos.

Sin embargo, una vez la guerra fría se enfrió, por así decirlo, no ha habido más misiones tripuladas a la Luna, principalmente por los altos costos y porque ya no había motivos propagandísticos.

Incluso, en la ciencia ficción, la Luna se menciona de pasada, mientras que los autores se centran en otros planetas y lunas.

La administración americana ha vuelto a poner sobre la mesa a la Luna, y pretende alunizar humanos de nuevo, y para, ello están desarrollando la misión Artemís.

Por lo tanto, estamos al comienzo de una nueva carrera espacial, lo que es muy interesante y estoy seguro, ayudará a acelerar la exploración espacial.

Así, la agencia planea primero establecer una presencia humana en la órbita lunar, una especie de Estación Espacial Internacional en la Luna.

Según ellos, la usarán como un campo de pruebas para preparar misiones al espacio profundo.

Pero, que no es solo la NASA, también el director de la ESA, la Agencia Espacial Europea, mencionó que quiere construir una aldea lunar, aunque les falta la capacidad financiera para hacerlo, por lo que se ofreció de construirla mediante cooperación internacional.

Además, está la agencia Espacial China, que recientemente han tenido éxito con su rover lunar, y ha demostrado su interés, en explotar económicamente los recursos lunares.

El viaje para colonizar la luna:

Y es que la Luna es nuestro cuerpo celeste más cercano, y por lo tanto, es relativamente fácil alcanzarlo.

Un viaje a la Luna, nos toma unos 3 días. Tal vez alguno se sorprenda, pero es que la luna está bastante lejos, y no basta con un día. Pero claro, es un viaje mucho más corto que a Marte, que nos tomaría unos 3 meses en condiciones de lanzamiento óptimas.

Pues bien, si hablamos en términos energéticos, la diferencia de un viaje a la Luna o a Marte, no es mucha, ya que una vez acelerado fuera de la órbita terrestre, un cohete seguirá su curso. Solo hay que apuntar bien.

Aunque, eso si, los viajes a la Luna serán más baratos por conllevar menos costes asociados.

Sin embargo, la diferencia de tiempo, entre los dos viajes, si que es un problema. Un viaje a Marte es de 3 meses fuera de la protección del campo magnético de la Tierra. Esto significa que los tripulantes estarán expuestos a los vientos solares y a la radiación cósmica. Esto significa que estarán expuestos a más radiación en 3 meses de lo que una persona normal lo está toda su vida, y como es lógica, puede tener consecuencias nefastas antes incluso de que arriben al planeta rojo.

Además, la Luna orbita la Tierra a 385.000 kilómetros de distancia, por lo que la comunicación entre la Tierra y la Luna sería muy fácil, con métodos y tecnología actual.

Apenas habría más retraso, que en una videoconferencia normal entre continentes. En Marte en cambio, la tremenda distancia hace que las transmisiones tengan un retraso mínimo 6 minutos, así que si ya es frustrante una llamada en Skype o Zoom con lag, imaginate en Marte.

Y es que si hay algún tipo de emergencia en la colonia, los astronautas tendrán que arreglarlo ellos solos, ya que la asistencia remota no llegará a tiempo. En cambio en la Luna si sería posible una misión de salvamento, ya que sólo tomaría 3 días.

El lugar del asentamiento:

Pero bueno, si queremos colonizar la Luna, ¿dónde lo haríamos?

El mejor lugar en la Luna es el polo sur. Y lo es por 2 motivos principales.

Primero, las partes más elevadas, reciben luz solar casi constante, lo que permitiría la producción abundante de energía solar sin interferencias.

Y dos, los cráteres ahí, están sumidos en la oscuridad perpetua, lo que hace que tengan enormes depósitos de hielo de agua.

Por cierto, el cráter llamado Shackelton es el candidato ideal por estos motivos que te he dicho.

Así que, una vez escogido el lugar y aterrizado, los colonos deberán dedicar sus primeros esfuerzos, a crear un hábitat duradero a largo plazo. Lo más lógico, es que lleven consigo, una serie de hábitats temporales mientras este proceso se lleva a cabo, como podría ser la propia nave con la que han aterrizado, o también hábitats hinchables, que de hecho se están desarrollando y ya se consideran como tecnología viable.

En cualquier caso, estos hábitats serán pequeños , y sólo tendrán lo básico para sobrevivir.

Para construir los hábitats más duraderos ha habido infinidad de propuestas, ya que la NASA ha convocado varios concursos arquitectónicos, y es que hay propuestas,de lo más interesantes, que van desde usar el hielo allí presente para moldear el edificio, como si fuera un iglú, hasta hacer crecer hongos que recubran las paredes.

Pero la gran mayoría se inclinan, por usar el regolito lunar, para construir el hábitat, mediante tecnologías de impresión en 3D.

Primero excavarían el material y lo procesarían con un poco de hielo local, para hacer una especie de cemento, y luego, imprimirían la estructura por capas, con robots autónomos hasta crear un hábitat lo suficiente grande para su habitabilidad.

Y es que la tecnología robótica será muy importante, ya que, como te puedes imaginar, los astronautas no podrán trabajar con comodidad en el exterior, debido a los trajes, y mucho menos ponerse a hacer de albañil. Así que la asistencia mediante robótica e Inteligencia Artificial será fundamental, pero de momento, no tenemos algo así, que podamos usar allá arriba, por lo que esta tecnología debería desarrollarse antes.

Además, estos habitats deberán aislarse eficientemente de la radiación.

Por esa la fase final de muchas de las propuestas, se recomienda enterrar el hábitat para protegerlo de la radiación.

Aunque esto también puede elevar el nivel de estrés de los astronautas, al no haber apenas espacio, ni ventanas, y éstos se sentirán como en una tumba.

Y si crees, que esto no es importante, piensa en las tripulaciones de submarinos o los científicos de la antártida.

Ambos sólo están sometidos a esas condiciones por unos meses, y con controles psicológicos continuos, para asegurar su buen estado mental.

Y si se detecta un problema, pues lo mandan a casa a descansar, pero en la Luna esto no será posible, por lo que sólo se seleccionarán a aquellos astronautas que demuestren una gran voluntad de superación.

En la Luna, dependiendo siempre del presupuesto, estos primeros moradores, podrán ser rotados cada 6 meses o un año.

Cuándo los hábitats estén listos, deberán ser presurizados.

Lo más fácil, es generar oxígeno del propio hielo, mediante electrólisis, que además también generaría hidrógeno, con el que refinar hidracina como combustible extra.

Y una vez que ya tengamos oxígeno en nuestro hábitat, será fácil reciclar este ambiente cerrado, como ya se hace por ejemplo en la estación espacial internacional.

El hielo es muy importante y por eso, las agencias espaciales siempre buscan presencia de agua fuera de la Tierra.

Pero también se han propuesto otras opciones.

En la Luna también se ha propuesto el calentar el polvo lunar para liberar las moléculas de oxígeno e hidrógeno allí atrapadas como otra forma de generar aire y agua para el consumo humano.

Obtención de energía:

Pero para esta tarea, será necesaria una producción sustancial de energía.

La primera opción es la de usar paneles solares, y como ya hemos dicho, en la Luna, esta es una opción óptima, ya que en los riscos del polo sur, los paneles recibirían luz casi permanentemente.

Otra opción, es enviar un reactor nuclear, que garantizaría una producción energética más estable.

De hecho, esta opción en la Luna es atractiva, por la presencia de Helio 3, que podría usarse como sustituto del tritio.

En el año 2010 la NASA ya propuso un modelo de reactor, que se podría usarse en una futura colonia, y estudios posteriores avalaron su idoneidad, por lo que esta tecnología, igual que la solar, ya es factible.

Además, como la radiación ya es un factor que se soluciona con el aislamiento de los hábitats, solo habría que enterrar estos reactores, pero estando cerca de la colonia.

Pero Lo mejor sin duda, sería tener una producción energética híbrida, es decir, con los 2 sistemas, para solventar posibles fallas.

Lo que sí que hay que tener en cuenta, es que se necesitarían abundantes baterías, como medida extra ante apagones.

Afortunadamente, en la Luna se podrían fabricar baterías de hidrógeno, una tecnología, que usan algunos coches eléctrico ya ahora en la Tierra.

Agua y comida para colonizar la luna:

Y una vez el hábitat esté listo, la siguiente tarea sería, la de conseguir un flujo de agua constante para la colonia, de alrededor, de 5 litros por colono al día.

Esto no sería un problema debido a la abundancia de hielo.

Además de que nuevamente contamos con sistemas de reciclado que ya se usan en la estación espacial internacional.

La producción de agua es tan fácil como extraer el hielo y derreterlio en un horno hasta que se evapora.

Después, una vez condensado, se filtra mediante filtros cerámicos y de carbón y este agua ya quedaría lista para el consumo humano.

A partir de aquí, podríamos empezar a cultivar plantas, para alimentar a los colonos.  Pero aunque haya tierra en forma de regolito, esta tierra no es apta para el cultivo, así que tendrá que tratarse con fertilizantes, y después de ello, mezclarse con materia orgánica, para obtener un sustrato con la textura ideal, para que las semillas puedan brotar.

Ya se hizo un estudio que demostró que se podían hacer crecer plantas en el regolito.

Otra opción sería la acuaponía, que es hacer crecer plantas cuyas raíces estasn sumergidas en agua, en un ciclo cerrado.

Este agua contiene un estanque para peces, que mediante sus deposiciones, entregan nutrientes para las plantas al agua.

Los peces más usados son las tilapias, porque son muy fáciles de mantener: comen de todo y sobreviven bien en aguas cerradas.

Y estos pececitos podrían ser cocinados y consumidos por los astronautas, siendo una fuente de proteínas frescas para nuestros colonos.

Además los desechos y las deposiciones humanas, también servirían de fertilizante, ya que, como es normal, en estas colonias, habrá que aprovecharlo todo.

Así que, seguramente, como con la energía, lo más inteligente sea usar los dos sistemas: acuaponía y regolito.

Eso si, se deberá tener en cuenta, que estas granjas, necesitarán bastante energía, por ejemplo para la luz, y tendrán que ser cuidadas diariamente por los astronautas.

Estas granjas, también generarán oxígeno.

Con todo esto, ya tendríamos lo básico para poder sostener a nuestra colonia lunar, pero no sería una vida fácil para los colonos, ya que estarían recluidos en un espacio muy pequeño, comiendo siempre lo mismo y sometidos a estrés y cargas de trabajo constantes.

La salud de los astronautas:

Y eso, sin hablar de los problemas de salud asociados, a vivir en un ambiente de baja gravedad.

Esos problemas incluyen la pérdida de masa muscular y masa ósea, problemas de visión, mala distribución de líquidos en el cuerpo, la pérdida de equilibrio, el desalineamiento de la columna, problemas cardiovasculares y desajustes en el sistema inmunitario.

Algo que hará que la vuelta a casa para estos colonos sea un verdadero reto.

Y es que para tratar de contrarrestar algunos de estos problemas, los colonos tendrán que hacer ejercicio constante, alargando aún más sus tareas diarias.

Aún así, nunca faltarán candidatos, ya que todas las iniciativas, para crear colonias, han recibido aluviones de participantes, pese a las dificultades que supondrán.

El envío de todo lo necesario:

Además, enviar todo lo necesario allí tampoco será fácil y tal vez se haga, en varios lanzamientos y misiones.

Un cálculo previo estimó que los costes serían de unos 20.000 millones de dólares, para crear una colonia en la Luna.

Así que ¿cuáles son los beneficios económicos, a largo plazo, de las colonias humanas en la Luna o Marte?

Pues bien, en términos logísticos, la Luna tiene una mayor ventaja sobre Marte por su cercanía a la Tierra y menor gravedad.

Muchísimo más barato que enviar algo de vuelta en cohetes desde Marte.

Además la Luna además se cree rica en potasio, tierras raras y fósforo.

La vida en la Luna implicará el desarrollo de nuevas tecnologías, con mucho énfasis en la automatización y el aprovechamiento de recursos al máximo.

Tecnologías que también podrán ser usadas en la Tierra, convirtiendo a la Luna, en un importante centro de I+D.

Estas tecnologías puede que también resulten, en la creación de productos finales en la propia Luna.

Además, la baja gravedad también fomentará la aparición de nuevos materiales imposibles de sintetizar en la Tierra, como podrían ser las espumas metálicas.

Toda esta actividad, generará un comercio entre la Tierra y las colonias. Curiosamente, a muy largo plazo, será más beneficioso para las colonias, ya que enviar los bienes desde ellas es más barato por su baja gravedad.

Y es que, todo aquello que salga de la Tierra, implicará un mayor uso de combustible y por lo tanto encarecerá sus productos.

Además, el regolito lunar, como te he dicho antes, tiene presencia de Helio 3.

Este, llegó a alcanzar el precio de mil quinientos dólares por gramo, o lo que es lo mismo, mil quinientos millones por kilo.

Debido a sus aplicaciones en la producción de fusión nuclear, podría convertirse en la principal fuente de ingresos para la colonia lunar. Además de sus posibles aplicaciones militares en bombas atómicas.

Esto nos lleva al lado más oscuro de la colonización espacial, y es que invariablemente estas tendrán presencia militar.
https://prozesa.com/?p=2236